Hoy os vamos a hablar de la caballa, un pescado azul muy sabroso y económico, presente en la mayoría de los hogares esta temporada.

Es un pez que realiza largas migraciones y viaja en bancos. Tras la puesta (entre mayo y julio para las caballas del Atlántico y entre marzo y abril para las del Mediterráneo), los grandes bancos se dividen en grupos para alimentarse de plancton, huevos de peces y pequeños crustáceos. Esto sucede durante la primavera mientras están en aguas cálidas. Hasta otoño los ejemplares jóvenes no irán mar adentro. En el invierno se quedan en zonas más profundas y no se alimentan. En el desove, producen entre 300.000 – 400.000 crías.

Además, hay que tener en cuenta que existen diferentes especies bajo el nombre común de «caballa», parecidas, pero no iguales:

Ya sólo en España, nos encontramos estas dos, muy abundantes en el océano Atlántico y en el mar Mediterráneo:

  • Caballa común: Scomber Scombrus. Es la más consumida en España. Recibe otras muchas denominaciones como por ejemplo Verdel o «Xarda», como se la conoce popularmente en Asturias.
  • Estornino: Scomber Colias o Japonicus. Se parece mucho a la caballa común en sabor, aunque al paladar presenta la carne un poco menos consistente y físicamente se distingue bien por las manchas que presenta en el vientre. En el sur de España es más cotizada y abunda más en el mediterráneo. Su características notricionales son similares.

Y a nivel mundial, hay más variedades:

  • Caballa pintoja: Scomber australasicus. Se encuentra principalmente en Australia, Nueva Zelanda, China, Japón, México y el Mar Rojo.
  • Caballa isleña: Rastrelliger faughni. Habitual en el océano Pacífico.
  • Caballa rechoncha: Rastrelliger brachysoma. Abunda en aguas tropicales (Índico y Pacífico)

Estas especies no suelen encontrarse en el mercado español.

Se trata de un alimento con grandes propiedades nutricionales:

  • Con sólo 10 gramos de grasa por cada 100, constituye una excelente fuente de ácidos grasos poliinsaturados, omega-3, unas grasas muy saludables y con múltiples beneficios para la salud.
  • Destaca también su gran aporte vitamínico: vitamina D y B12 y de minerales como el selenio, el fósforo y el potasio.
  • Contiene 19,3 g por cada 100g de proteínas de alta calidad y pocas calorías: 236 calorías por cada 100 gramos.
  • Su presencia de mercurio es baja por lo que no hay recomendaciones que limiten su consumo como sucede con otros pescados azules de mayor tamaño.

Por lo tanto, es un pescado nutritivo, sabroso y asequible que sólo aporta beneficios, por citar algunos:

  • Facilita la absorción y fijación del calcio.
  • Tiene acción antioxidante.
  • Ayuda a disminuir el colesterol y los triglicéridos.
  • Favorece el funcionamiento correcto del sistema nervioso.
  • Protege el sistema cardiovascular.

Por ultimo, os dejamos enlace a nuestra ficha técnica de la caballa/verdel/xarda  y a un vídeo que hemos grabado durante esta temporada de la caballa, así veis como trabajamos en ASTURPESCA.